lunes, 3 de marzo de 2014

Nuestro Padre Jesus en sus Sagrada Entrada en Jerusalen de Osuna (Sevilla)

Nuestro Padre Jesús en su Sagrada Entrada en Jerusalén de la localidad sevillana de Osuna.
 
La imagen de Nuestro Padre Jesús en su Sagrada Entrada en Jerusalén de Osuna, llega a mi estudio en un estado de conservación deficiente, tanto en lo pictórico como en lo estructural.
 
Tras depositar la imagen en mi estudio dieron comienzo los trabajos de restauración, dividido en tres fase: limpieza, restructuración pictórica y restructuración estructural.
 
Los trabajos de limpieza nos llevó a observar que la suciedad que poseía la imagen, cubría diferentes  fisuras, aunque ningunas de consideración, a pesar de la envergadura de alguna de ellas.  
 
 
La limpieza nos  hace ver los diferentes tonos pictóricos que poseía la obra, y así nos facilitaría la reconstrucción de los mismos a la hora de policromar.
Con la imagen limpia en su totalidad, los trabajos se centraron en consolidar la obra, para ello se realizó a  una nueva peana o base, puesto que la que poseía la obra se encontraba infestada de xilófagos.
El sistema de fijación que se utilizaba para procesionar, no era el adecuado, este produjo bastantes deterioros sobre la base, la cual imitaba unos rastrojos con diferentes ramajos que incluso llegaban hasta la panza del animal.
Se decidió la eliminación de estos "adornos" con el fin de dar mayor naturalidad a la imagen.
Para ello se realizó una composición de paños y siguiendo el estilo de la obra se eliminaron  los rastrojos anteriormente descritos.
La base era la zona mas deteriorada llegando a desaparecer casi en su totalidad, algo que desde mi punto de vista carecían de valor artístico, se plateo a la Hdad, la realización de un empedrado, con el fin de proporcionar a la obra un  mejor acabado tanto en lo estético como en lo artístico.
 
Con la imagen consolidada, reformada la base y los paños, se le realizó al juego de potencia, un nuevo sistema de colocación, mediante pernos enroscado.
Por ultimo, se policromó la imagen en su totalidad, respetando los diferentes tono pictóricos de la obra. 
*En la primera foto se observa el rostro de Ntro. Padre Jesús, seguidamente observamos detalles de los paños y el empedrado, y para terminar, en la última foto una imagen del resultado final del trabajo.
 
 

sábado, 1 de marzo de 2014

Virgen del Carmen de Puente Mayorga (Cadiz)


 Virgen del Carmen de Puente Mayorga de Cádiz.  

La Virgen del Carmen, realizada en pasta madera en los talleres de Olot, Barcelona, llegó a mi estudio en un estado de conservación preocupante.
Presentaba un oscurecimiento general y algunas alteraciones en su fisonomía, dada las diferentes restauraciones a las que había sido sometida.
 
Los repintes y sobre todo el barniz que los cubría hacía casi inapreciables  sus diferentes estofados.
 
El rostro, también esta se encontraba  repintado y cubierto de barniz. 
 
Los trabajos dieron comienzo con la retirada del barniz y de los correspondientes repintes.
Para su retirada fueron necesarios no solamente productos químicos, si no la inclusión en los trabajos de material mecánico, dado el grosos de los repintes y los barnices.
 
Una vez limpiada la imagen, fui sellando las diferentes fisuras que se encontraban ocultas entre la suciedad y las capas pictóricas.
 
Con la obra totalmente saneada, consolidada y limpia,  me centré en rescatar los diferentes estofados y componer su dibujo original.
 
Con el estofado  rescatado, me dispuse a policromar la obra y embellecer la misma.
En la elaboración del estofado se incluyeron cromatismos pictóricos resaltando mas si cabe, el elaborado tratamiento de esta técnica cromática. 
Al mismo tiempo se fue realizando la mano derecha de la imagen dado que tras la ultima restauración sufrió algunas trasformaciones que deformaron la extremidad.
Para ello se realizó un trabajo de proporción teniendo como referente la mano izquierda la cual se encontraba en su estado original.
Con el modelo en terracota definido, se elaboró la pieza original en madera de cedro, y de colocó en su lugar correspondiente.
 
Con la imagen totalmente policromada, los trabajos se centraron en ornamentar la peana que acompañaba a la imagen.
Para ello se colocaron un juego de molduras, una superior y otra inferior, las cuales fueron doradas en oro metal y la calle central se realizó una imitación marmolea.
 
 
Como conclusión del trabajo, le realice a la imagen una peana de mayor dimensión con un sistema de cogida que a su vez sirve de anclaje para el paso.
 
En la primera de las fotos observamos el rostro de ambas imágenes una vez acabada la restauración, en la segunda de las fotos, el estado en que llegaron ambas imágenes, y el tercera foto, el detalle de la nube, el estofado y la peana.